La Ley de Segunda Oportunidad es una herramienta legal diseñada para ayudar a particulares y autónomos en situaciones de insolvencia económica. Su objetivo es proporcionar una «borrón y cuenta nueva» a quienes, debido a circunstancias excepcionales, no pueden hacer frente a sus deudas. Sin embargo, cuando se trata de deudas con organismos públicos como Hacienda y la Seguridad Social, surgen preguntas clave: ¿Es posible incluirlas en este proceso? ¿Cómo funciona? Aquí te lo explicamos.
¿Qué es la Ley de Segunda Oportunidad?
Promulgada en 2015 en España, la Ley de Segunda Oportunidad permite a personas físicas, ya sean particulares o autónomos, cancelar parcial o totalmente sus deudas mediante un procedimiento regulado. Este proceso se articula en dos fases principales:
- Acuerdo Extrajudicial de Pagos (AEP): busca negociar con los acreedores para alcanzar un acuerdo de reestructuración de la deuda.
- Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI): si no se logra un acuerdo, el deudor puede solicitar la exoneración judicial de las deudas que no haya podido pagar.
Deudas con Hacienda y Seguridad Social: ¿Qué dice la ley?
Inicialmente, una de las críticas a la Ley de Segunda Oportunidad era la dificultad para incluir las deudas con la Administración Pública, ya que la normativa establecía limitaciones para exonerarlas completamente. Sin embargo, en 2022, se introdujeron modificaciones que mejoraron las condiciones para las personas con deudas frente a Hacienda y Seguridad Social.
Reglas actuales para estas deudas:
Inclusión parcial:
- Según la legislación vigente, hasta el 50% de las deudas con Hacienda y Seguridad Social puede ser exonerado si se cumplen los requisitos.
- La parte restante deberá reestructurarse mediante un plan de pagos aprobado por el juez, con plazos que suelen extenderse hasta 5 años.
Condiciones para la exoneración:
- El deudor debe haber actuado de buena fe, lo que implica demostrar que no ha cometido fraudes y que ha intentado negociar con los acreedores antes de solicitar la exoneración.
- Es necesario que el deudor esté al corriente de sus obligaciones fiscales más recientes, como la presentación de declaraciones tributarias.
Plan de pagos:
- Si no se logra una exoneración total, el juez establecerá un plan de pagos viable para que el deudor salde la deuda no exonerada.
- Durante este período, Hacienda y Seguridad Social pueden ofrecer flexibilidades, como fraccionamientos o aplazamientos.
Pasos para incluir las deudas públicas en la Ley de Segunda Oportunidad
Revisión de deudas:
- Realiza un análisis detallado de tus deudas totales, incluyendo las cantidades adeudadas a Hacienda y Seguridad Social.
Intento de acuerdo extrajudicial:
- Antes de acudir al juzgado, debes intentar un acuerdo de reestructuración con los acreedores, incluyendo a la Administración Pública.
Solicitud de BEPI:
- Si el acuerdo fracasa, puedes presentar una solicitud para acogerte al Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho.
- Incluye documentación que acredite tu situación financiera, tus intentos de negociar y tu buena fe.
Resolución judicial:
- Un juez evaluará tu caso y decidirá qué parte de las deudas con Hacienda y Seguridad Social se puede exonerar y cuál debe pagarse bajo un plan de pagos.
Ventajas y limitaciones
Ventajas:
- Proporciona una salida legal para situaciones de insolvencia.
- Permite negociar condiciones de pago más flexibles con Hacienda y Seguridad Social.
- Ayuda a los autónomos a retomar su actividad económica sin la carga de deudas insostenibles.
Limitaciones:
- No siempre es posible exonerar completamente las deudas públicas.
- Requiere cumplir estrictamente con los requisitos de buena fe y transparencia.
- El plan de pagos puede ser exigente dependiendo de la cantidad de la deuda restante.
Conclusión
La Ley de Segunda Oportunidad es una herramienta valiosa para quienes enfrentan dificultades económicas, incluidas deudas con Hacienda y Seguridad Social. Aunque las deudas públicas tienen ciertas restricciones para su exoneración total, las reformas recientes han hecho que sea más accesible incluirlas en el proceso.
Si estás considerando acogerte a esta ley, es recomendable contar con el apoyo de abogados especializados en derecho concursal para asegurarte de cumplir con los requisitos y maximizar los beneficios del procedimiento.
Recuerda: el objetivo de esta ley es brindarte una segunda oportunidad para reconstruir tu vida económica, siempre desde la buena fe y el compromiso de cumplir con lo establecido en el proceso.